Amistad 2.0
¿Cómo se puede tener tanta intimidad con algunas personas, sentir en el corazón el roce de sus palabras, de sus imágenes, y no conocer apenas su nombre?
A menudo me recuerdas a alguien,
tu sonrisa la imagino sin miedo…
¿Cómo se puede tener tanta intimidad con algunas personas, sentir en el corazón el roce de sus palabras, de sus imágenes, y no conocer apenas su nombre?
A menudo me recuerdas a alguien,
tu sonrisa la imagino sin miedo…
Tengo una amiga que se llama igual que mi primera hija. He tenido a mis niños y las Estrellas venían con el nombre puesto, pero igualmente ése sigue siendo su nombre.
Nos llevamos dos años y hemos pasado 26 viviendo juntas, ella en el 4º y yo en 5º piso. Cuando yo era pequeña siempre pensaba «el año que viene avanzo un curso y el siguiente ya vamos juntas a clase». Nos peleábamos por ir al lado de los botones en el ascensor y cuando no quería ponerme ropa nueva, mi madre me decía que era suya y yo me quedaba tan contenta. Ella decía que tenía un don porque sabía mover las orejas y yo la creía, aunque era incapaz de mover las mías. En la habitación de su hermano me hice pis un día de tanto reír, y nuestras Barbies protagonizaron mil historias de amor de película. Escribiendo esto me viene a la cabeza un papel pintado de flores y pájaros que tenía en su habitación…